5.

Todo el mundo contento en Sherry... mañana el Derby... comienza la Feria... y hoy mismo acaba de ganar el equipo local. Había sed de alcohol entre las multitudes.

Fuimos a cambiarnos de ropa a casa, envueltos en la nube de polvo que levantaban las últimas motos que iban llegando.
Más tarde, al salir, nos dimos cuenta de que la gente había tomado la calle y las tiendas, y que apenas quedaban bebidas en ningún sitio. Nos llamó El Pirata para decirnos que había conseguido algunas botellas de ron, y que nos las dejaba a buen precio. El Pelirrojo y yo estábamos sedientos y algo cortos de dinero, así que nos fuimos al cajero, pero la gran afluencia de gente en las últimas horas había dejado seco el río de billetes, por lo que tuvimos que cruzar media ciudad –o lo que a mí me pareció media ciudad- hasta el siguiente cajero, que nos saludó igual que su compañero cuando introducimos nuestras tarjetas: Cajero fuera de servicio, disculpen las molestias. -¡Y ya están de fiesta hasta las jodidas máquinas!-pensé yo, quizá en voz alta –Necesitamos dinero como sea, no pasaré esta noche en el dique seco-.
Me di la vuelta y ahí estaban, las plateadas luces de una sucursal del gran Silver Bank, con un gordo bigotudo saliendo de ella, sonriendo mientras se guardaba los recién horneados billetes en la cartera.
-Olvídalo, amigo.-dijo el Pelirrojo-Ni tu ni yo tenemos cuenta en el Silver, y ya sabes lo cabrones que son, no les sacaremos un céntimo sin dejarnos ahí un ojo.
-Tal vez otro día no,-contesté con pose heroica-pero hoy no estoy dispuesto a pasar mi última noche aquí sin dejarme también el hígado. Estamos hablando de libertad para emborracharse cuando hay tanto que celebrar, y un puñado de banqueros no me lo impedirán.
-¿Pero qué dices? Si no te marchas hasta el lunes...
-Me da igual, no veré a todos borrachos mientras yo esté sereno.

Y me lancé, y él me siguió, y el dolor de una cuenta bancaria herida por las comisiones se cerró con el ron. Y es gracioso porque... no recuerdo nada más de esa noche... ni siquiera el ver esa botella o beber de ella. Pero supongo que lo hice.